el alto vuelo del gato

CLXXVI
VUESTRO TERRORISMO

El terror que señaláis
nunca me ha de matar,
al no ser por un errar
de la suerte que me dais.
Que con eso me matáis.
Ese vuestro terrorismo
es tan sólo un silogismo,
y en mentira se encanalla
por no decir lo que calla.
Sea vuestro sinapismo.[1]



CLXXVII
NUEVO CLERO = POLÍTICOS

Al clero de la Edad Media
se le caería la baba
al ver como se os alaba,
políticos de comedia,
por no decir de ortopedia.
Sois torpes, zafios y romos,
ladrones, viles maromos,
ruines, necios, indecentes,
con dominio de las gentes
en estos tiempos de plomos.


CLXXVIII
SEÑORA JUEZ (A)

Para ganarte la vida
eres juez que juzga y falla,
con la toga y con la tralla,
con la ida y la venida.
Todo pasa de corrida.
Tu afición es siempre clara,
pues ni en la ley repara.
Eres juez aficionado,
favoreciendo allegado
político con la vara.

CLXXIX
POLÍTICO TERRORISTA

Terror es todo poder
erigido por encima,
y que con el miedo esgrima
su terror para vencer,
el odio para atraer
a su causa el acarreo,
ajetreo y bombardeo.
Pues no hay mayor terrorista,
encabezando una lista
de político escarceo.[2]

CLXXX
MANIJERO

Tienes mano, manijero,
perspicacia y cara dura,
y no vas a la aventura
como todo jornalero.
Como el amo eres artero,
como el amo eres el dueño,
como el amo tienes ceño
fruncido de mala leche.
Aunque en todo se sospeche
que seas su pedigüeño.

El manijero moderno
es producto de partido,
en el que hace su nido
como buitre subalterno,
pretendiendo ser eterno.
Pues el principio y el fin
de producto tan malsín
se encuentra en el cacicato.
Por ello no me recato
en pintar el figurín.[3]




[1] Se puede leer también:
Sea vuestro cataclismo, despotismo, fanatismo, mecanismo, paganismo, solecismo, comunismo, etc.
[2] O bien:
De político himeneo, meneo, saqueo, falseo, bureo, coleo, chapeo, jaleo, mareo; o bien:
De político el empleo.
[3] Este verso se puede leer:
En pintar el malandrín
En pintar el mandarín
En pintar el matachín.