25 de enero de 2007
















CCLXVI
ENSEÑANZA CON CABOS ROTOS

Manipulan la enseñan-
como si fuera comer-.
Se portan como los cuer-
cuando de carne se enfan-.
Sangre a la sangre desan-.
Tres pimientos les impor-
aquello que les encor-
las morras a los chava-,
les atonta, los maltra-.
A ellos no les impor-.

Cabos rotos, cabos ro-,
van mis versos como pue-,
diciendo lo que no quie-.
Voces rotas, voces ro-,
como están rotas las bo-
por gritar lo tan paten-,
la verdad y tan presen-.
los políticos son mier-.
Nos ensucian con su jer-.
La enseñanza no consien-.


CCLVII
PESE

Tienes un bolígrafo bic y una libreta,
y la cara del ansia en la entrepierna.
El éxito, la fama al triunfo alterna,
y esperan ya tus obras de poeta.
Nada sirvieron purgas de palmeta
sobre tu sabia mano ofrecida,
golpeándote como estremecida.
Tú serás vate cueste lo que cueste.
Aunque el fuego del infierno te tueste
o en el agua te den la zambullida.

CCLXVIII
HOMÍNIDO PÚBLICO

Un político por fuera,
político por de dentro,
politicastro lumbrera,
politicucho de adentro,
politiquillo te encuentro,
astuto, calculador,
dirigente al por mayor,
hombre público llamado,
con las putas comparado.
No hay marrullero mejor.

Por la puta y por la punta,
hombre público te llamas,
astuto en todas las tramas
donde negocio barrunta.
Tanto sea en yunta o en junta.
Siempre has sido la desgracia
de auténtica democracia.
La del pueblo soberano
siempre directa, en la mano,
para matar tu falacia.

Hombre político en puro,
pues no se te sabe de oficio,
más que el propio beneficio,
para ti que está seguro,
y asegura tu futuro.
Naciste con gran carisma.
Tu grandeza nos abisma.
Has llegado a lo más alto
del cielo por un asalto.
No te rompiste la crisma.

CCLXIX
RASERO

Mi calidad no mido con los premios,
tras los que corren todos como tasa.
Único reclamo que les da rasa
vida y liga a los poetas de gremios,
del bic y la libreta los bohemios,
de creación radical pura y dura,
de pasión libre y de tan gran altura
como merece un arte ensimismado.
No el premio que le tiene condenado.
Prostituirse al albur de un caradura.

CCLXX
MALTRATO

La mujer toda perfecta,
el hombre cruel cargante,
criminal mortificante,
con la hembra tan correcta,
tan afecta y predilecta.
Hizo Dios al hombre malo,
menos en el intervalo
de la costilla, en mujer.
Quedando santa en su ser.
De ahí viene el varapalo.

1 comentario:

LEONOR DINAMARCA dijo...

cómo se obtiene tu libro???
Un beso
de poeta loca